Lectura del Tarot
Práctica adivinatoria del futuro que se realiza colocando de diferentes modos las cartas de esta baraja sobre una superficie.

El tarot es una baraja de naipes a menudo utilizada como medio de consulta e interpretación de hechos (presentes, pasados o futuros), sueños, percepciones o estados emocionales que constituye, además, un tipo de cartomancia. Sus orígenes datan al menos del siglo XIV. La técnica se basa en la selección de cartas de una baraja especial, que luego son interpretadas por un lector, según el orden o disposición en que han sido seleccionadas o repartidas. La baraja de tarot está compuesta por 78 cartas, divididas en arcanos mayores y menores. La palabra «arcano» proviene del latín arcanum, que significa "misterio" o "secreto".

LOS ARCANOS MAYORES
El tarot se puede utilizar como medio de conocimiento, pues estas cartas son portadoras de profundos significados. Los arcanos mayores del tarot simbolizan un camino, un viaje iniciático, un proceso de transformación; nos muestran a nosotros mismos en diferentes momentos o etapas de nuestra vida.
Los arcanos mayores cumplen la función de orientar. Se dice que los antiguos sacerdotes del Templo de Jerusalén ya interrogaban al oráculo con veintidós láminas muy similares a los modernos arcanos mayores. En cuanto a los cincuenta y seis arcanos menores, hay autores que consideran que básicamente representan aspectos anecdóticos de la vida, y que es mejor utilizarlos a modo de juego.
Respecto a los arcanos mayores, no hemos de considerar las cartas como entidades independientes, pues forman una secuencia. Los veintidós triunfos son una progresión, con un punto de partida (el Loco) y una llegada (el Mundo): cada triunfo se fundamenta en el anterior y abre el camino al que le sigue. Estos veintidós arcanos son veintidós etapas que tenemos que recorrer paso a paso para encontrar a nuestro ser verdadero, para alcanzar la sabiduría interior.
Vamos a emprender un arduo viaje, vamos a recorrer un difícil camino que empieza con el Loco y terminará con el Mundo. Los mensajes y consejos que nos transmiten las cartas nos van a servir para mejorar nuestra vida, nos van a ayudar a evolucionar.
Las cartas nos indican cuáles van a ser las consecuencias de nuestros actos y decisiones, nos dicen cuál va a ser el resultado más probable, es decir, las cartas nos marcan una tendencia, pero cada persona puede actuar para cambiar la tendencia que le marcan las cartas. Aunque a veces hay energías favorables o desfavorables a que te suceda algo determinado, siempre hemos de tener en cuenta la importancia de nuestras acciones.
Con respecto a las cartas que en una tirada salen invertidas: las inversiones profundizan en el significado de la carta. En general, una carta invertida nos indica que la energía que tiene esa carta (las cualidades que esa carta simboliza) se encuentra bloqueada, deformada o encauzada en otra dirección, en una dirección errónea, equivocada. Quiere decir que la energía no está fluyendo, la persona está bloqueada y la energía no circula.
Cuando las cartas salen invertidas debemos encontrar la manera de volver a ponerlas en su posición correcta, no hay que negarlas, hay que trabajar sobre ellas y ponerlas de pie. Además, si consigues poner de pie una de ellas, luego las demás ya se ponen de pie con mucha facilidad.
Lo interesante respecto a los arcanos del tarot es que su significado no está "escrito en piedra", es algo vivo, y aunque por ejemplo para mí la Maga tiene un significado específico, para otra persona puede tener un significado diferente. Desde mi punto de vista, cada uno de nosotros puede aportar sus propias vivencias al significado de los arcanos.
LECTURAS
Al leer las cartas es importante dar mensajes positivos, aunque las cartas no sean buenas, porque sino puedes hundir psíquicamente al consultante. Las personas que vienen a una consulta necesitan ánimos y ayuda.
Otra cosa importante es que no hay que jugar a adivinar el pasado de la persona consultante. El pasado ya no existe y no se puede cambiar. Pero podemos cambiar las cosas en este momento, por eso hay que leer en las cartas el presente y el futuro. Querer asombrar al consultante diciéndole cosas sobre su pasado es ridículo, pues no le vamos a decir nada que no sepa.
Para mí también es muy conveniente decirle al consultante algo así: "de todo lo que te diga al leerte las cartas quédate sólo con lo que te resuene, con lo que sientas que es para tí, y el resto lo echas a la papelera y te olvidas. Toma sólo lo que te resuene. El resto no importa y lo dejas".
Cuando tiras el tarot son los guías los que ordenan las cartas, no hay azar. A cada uno le vienen las personas que le han de venir para la lectura.
De nada sirve aprenderse de memoria el significado de los arcanos, pues las cartas hay que sentirlas, integrarse con ellas, y utilizarlas con mucho respeto y deseo de conocimiento.
Las cartas se leen, no se adivinan, un tarotista lee las cartas como si se tratase de un libro abierto compuesto por códigos y símbolos. Como cada una de las cartas tiene varios significados, en una lectura debemos ser capaces de captar intuitivamente cuál es el significado adecuado para cada carta. Por otra parte, no hemos de considerar las cartas como entidades independientes, pues el verdadero significado de la lectura lo obtendremos al fijarnos en las configuraciones que forman las cartas entre ellas.